La autora nos describe, desde la perspectiva de una niña de nueve años, la vida cotidiana en un barrio obrero de Bagdad, durante las décadas de los años cuarenta y cincuenta, que conmovieron la vida política y social del país. El universo de la niñez nos es restituido a través de la memoria: recuerdos que permanecen guardados, como prendas que ya nadie usa, entre bolitas de naftalina en un viejo baúl