Vasili Grossman, que durante la guerra ha viajado con las tropas soviéticas para describir en sus crónicas lo que ocurre en el frente, será el encargado de reconstruir el relato de lo acontecido en Treblinka. De esta forma, Grossman será con "El infierno de Treblinka" el primer cronista en relatar al mundo entero los horrores del exterminio.